Inexperto en la vida completa
No sé nada, absolutamente nada
No sé rascarme el iris
Para sacar la mugre que no me permite mirar a la perdida conciencia existencial.
No sé perderme
Tampoco se perder.
No sé encontrarme
Ni consultarme para saber donde estaba buscándome.
¿Dónde estaba?
No sé volar
No sé aletear para subir
Donde los sueños se transformaban en metas.
No sé lamer
No sé besar las cicatrices de la luna cuando nacía dándome una bienvenida
Ni siquiera supe como abrazarla cuando moría el día el 30 de julio.
¿Cuándo me quebré el saber del conociendo que no sabia donde estaba?
No sé si me amaría tanto como ese alguien que tanto me quiso
Que no sé quien es.
No sé si cuando me golpee el ultimo chacra
Gritaba mi cuerpo o el muladhara.
¿Quién sabe, a lo mejor soy narcisita?
¿Quién sabe, quizás ni existo?
¿Cuántas veces me dije que no sabía nada para abrir el tercer ojo?
No sé escribir
No sé como no se escribir.
No sé quien me enseño a escribir.
¿Pero qué digo?
¡Algo sé!
Sé que estaba sentado al lado del universo
Me contaba que cuando meditaba no sabía nada
Pero que lo sabia todo, porque lo era todo.
